El fenómeno empezó hace cosa de unos 6 meses o quizás un poco más. Resulta que poco a poco las aguas del río Guadalquivir empezaron a tornarse en un color marrón. Esto en un principio no tubo mayor repercusión ya que se pensaba que se trataba de un fenómeno natural y que las aguas volverían a su color más normal. Pero no ha sucedido así, durante un tiempo de espera, se tenía la esperanza que el fenómeno desapareciera, sobre todo en estos dos últimos meses para que el período estival fuera de lo mas agradable. Desde el ayuntamiento empezaron a analizar las aguas para determinar la naturaleza de lo que por ahora no se tiene explicación, es decir, aún no se sabe a ciencia cierta de donde procede el problema. Se apunta por un lado a una ineficaz labor en la planta depuradora de Sanlúcar, también se achaca a vertidos incontrolados, a un proceso natural de auto-reciclaje; también es posible que este color sea causa de la presa de Alcalá del Río, donde se realizó un enorme desembalse a finales de Noviembre, que posteriormente cerraron evitando así que se produzcan los necesarios caudales ecológicos. En cualquier caso, estoy seguro que todas estas explicaciones no son la solución al enigma, sino que igual es una suma de varios factores. Ahora es el turno de nuestros gobernates de tomar las decisiones oportunas. Aquí tenéis un pequeño álbum de fotos donde se puede apreciar perfectamente el estado de las aguas del río.
Fuente: Ecologistas en Acción.
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